27 de abril de 2010

Revolutionary Road


Sam Mendes parece tener un don especial para retratar el sinsentido de la vida cotidiana, la apatía que la sociedad actual causa en el individuo, ese sentimiento de "vacío", que tan bien expresa Kevin Spacey en American Beauty. En Revolutionary Road, el protagonista no es ya un hombre si no una mujer, April Wheeler (Kate Winslet), quien para salvar su relación con su marido, y huir de una vida monótona y triste, propone ir a París, con la idea de empezar desde cero, y conseguir todo aquello que por su condición estancada no puede alcanzar.
Todo un alegato en favor del desarrollo personal, más allá de los convencionalismos sobre la vida fácil y cómoda, Revolutionary Road es una película inteligente que retrata, con sobriedad una pareja infeliz condenada a destruírse mutuamente. Cabe decir que las actuaciones de ambos ( Leonardo DiCaprio y Kate Winslet) son impecables, y no en vano Kate fue galardonada con un globo de oro y un óscar por su trabajo.


Titulo en español: Revolutionary Road
Título original: Revolutionary Road
Año: 2008
País: EE.UU
Director: Sam Mendes
Guión: Justin Haythe (Novela: Richard Yates)
Música: Thomas Newman
Fotografía: Roger Deakins
Reparto:
Leonardo DiCaprio, Kate Winslet, Kathy Bates, Michael Shannon, Kathryn Hahn, David Harbour, Dylan Baker, Richard Easton, Zoe Kazan, Jay O. Sanders, Max Casella
Productora: Coproducción USA-GB; DreamWorks / Paramount Vantage / BBC Films
Duración: 119 min.

14 de abril de 2010

porque nos gusta pasar miedo


El cine de miedo o de terror se basa en una sola y simple premisa: hacérselo pasar mal al espectador. De ahí que realmente el propio argumento no sea lo más importante de una película.
El porqué el monstruo está ahí, o de dónde viene, o porqué ataca a los humanos y no es vegetariano, son otras cuestiones, que no vienen al caso.

Dicho ésto, a algunas personas nos gusta pasar miedo. Hay muchísima gente adicta a las películas de terror. Y éstas son tanto más buenas cuanto mejor y más sepan causarnos miedo, pero si sentir miedo no es un sentimiento agradable....
¿porqué tenemos este comportamiento, rayano en el masoquismo?


No hay una explicación clara a esta cuestión. Lo primero que todos los estudios señalan es que, el miedo, es una emoción primitiva, que pone en funcionamiento los mecanismos más básicos del cerebro humano, por decirlo así, nuestro cerebro funciona a un nivel animal, instintivo.
Además, los estados de alta tensión producen una hormona, la adrenalina, que activa todo el sistema nervioso, y nos prepara para actuar con gran rapidez ante un peligro inesperado. Pero lo más relevante es que la adrenalina puede estimular la segregación de dopamina, la hormona responsable de la sensación de bienestar. Así que pasar miedo puede ser placentero.

Pero también existen otras explicaciones más psicológicas a este fenómeno.
La primera sostiene que dichas situaciones de terror, no real permiten a la gente emular una situación límite, y recrearse en su propia respuesta. O lo que es lo mismo, llevar el cuerpo a un nivel de estrés muy elevado, y tratar de mantener aún así el control (no vale gritar ni salir del cine corriendo, claro... )

La segunda explicación tiene cierta relación con la primera, y propone que las películas de terror permiten a la gente simple y llanamente, olvidarse de sus problemas, y durante un pequeño momento, relativizarlos. Pues evidentemente, ante un zombie hambriento, cualquier cosa que no sea la propia superviviencia, pierde bastante valor. Ésto permite explicar el gran auge del cine de terror de los años 30, justo en el momento de la gran depresión económica. Si ahora la gente lo está pasando tan mal como entonces, sería correcto decir que volverían a las salas ¿no?

Sea lo que sea, lo cierto es que los fans del terror seguiremos viendo estas películas y pasándolo mal ( y bien) con ellas.

7 de abril de 2010

el secreto tras la puerta



En numerosas películas se trata la importancia del inconsciente. Desde Recuerda (Spellbound) de Hitchcock, hasta sin ir más lejos, la película del último post, Shutter Island. En El secreto tras la puerta, de Frizt Lang, se vuelve a utilizar la misma idea. Lang toma además algunas otras referencias de la obra de Hitchcock (concretamente, de Rebecca), en lo relativo a la situación de la protagonista, y a algunos de sus personajes principales.
La trama presenta a Celia (Joann Bennet), una rica heredera recién casada con un misterioso hombre al que ha conocido sólo unos pocos días antes en México.
A pesar de estar locamente enamorada de él, al poco su extraño comportamiento, abandonándola a la mínima ocasión, con excusas que más tarde se descubren falsas, estará a punto de acabar con el matrimonio. Pese a su actuación, Celia decide darle otra oportunidad, y cuando llega a la casa donde ambos van a vivir, descubre que su marido tiene una morbosa hoby: colecciona habitaciones donde se han cometido asesinatos.

Sin estar a la altura de otras de las mejores obras obras de Lang, se trata de una interesante película de suspense donde el cineasta hace un uso somero y adecuado de los elementos visuales que son cruciales para la trama ( las velas, la llave, la habitación..) completando un relato sencillo pero potente. El estilo expresionista de la puesta en escena y la música de Miklos Rozsa, van a al par dosificando una tensión creciente que se resuelve de manera satisfactoria, y menos destructiva de lo que habría cabido esperar. Una película para disfrutar una vez más de la particular forma de dirección de Lang.


Titulo en español: El secreto tras la puerta
Título original: The secret beyond the door
Año: 1948
País: EE.UU
Director: Frizt Lang
Guión: Rufus King & Silvia Richards (Historia: Rufus King)
Música: Miklós Rózsa
Fotografía: Stanley Cortez (B&W)
Reparto: Joan Bennett, Michael Redgrave, Barbara O'Neil, Anne Revere, Natalie Schafer, Anabel Shaw, Rosa Rey, James Seay,Paul Cavanagh, Mark Dennis
Productora: Diana Production Company
Duración: 99 min.